_Capitulo 3 El txikipark y el colegio
A la mañana siguiente, era domingo, me desperté y vinieron unas chicas de Cruz Roja preguntando si quería ir al txikipark. ¿Al txikipark? ¿Cómo iba ir yo al txikipark? Pero si eso está en el Boulevard. En fin que dije que sí y me puse una bata para no pasar frío y bajé de la cama y me puse mis zapatillas de estar en casa. Salí de mi habitación y me dirigí a una sala con libros, peluches, una tele, juguetes, mesas, pinturas y ordenadores. ¡Tenía de todo!hasta un tobogán de esos que hay en el txikipark.Estuve jugando con los ordenadores y después vi una peli.
Después, me tuve que ir de nuevo a la habitación porque la doctora me llamó y me miró la fiebre, no tenia y volví al txikipark. Hice un dibujo pero no me salió muy bien porque la mano que tengo vendada es la derecha y escribo con esa, no soy zurda. Las chicas dijeron que me estaban llamando para comer y fui a mi habitación y ahí estabade nuevo la bandeja y yo sin poder contaros qué comida era, porque no me acuerdo. Pero lo único que me acuerdo es de que ERA COMIDA.
Eso seguro, después de comer vinieron mis tíos, mi prima y mi hermano. Estuvimos los tres juntos jugando a «quién es quién» mientras mis tios y mi padre hablaban, Berna,Begoña e Iñigo, quiero decir aita. Y nosotros los niños, Jone, Ander y Ainhoa, quiero decir yo. ¡Qué depistada estoy hoy, madre!.
Después de cenar, que sí me acuerdo de o que era: sopa, tortilla de jamón y yogurth, vino mi madre, mi padre se fue y estuvimos viendo«Gnomeo y Julieta»,cuando íbamos por media peli le pedí a mi madre patatas y fue a la máquina a comprarme una bolsa de patatas.Terminó la peli, me lavé de nuevo los dientes(por haber comido las patatas)y me fui a la cama.
_Capitulo 4 Solo en el colegio
Al despertarme me dijeron que me iban a sacar sangre. ¡DE NUEVO, NO! De nuevo mi mayor pesadilla, ¡ no!. Me puse una vez más nerviosa, como siempre, empecé a llorar, llorar, llorar y llorar pero de nuevo como la última vez, ¡ ZAS!, me pinchó de nuevo la muy maja de la enfermera. Entonces vino una chica llamada Ana y me dijo que si quería ir al cole, le dije que sí y fuimos a una sala con una mesa muy grande, una cocinita, un gran armario, y muchos ordenadores, con una tele que parece un ordenador.
En la mesa había un niño que estaba hablando con Ana y yo mientras estaba jugando con la cocinita, al poco tiempo el niño se fue porque decía que se mareaba y yo empecé a hacer una ficha con Ana. Cuando la terminé estuve haciendo ejercicios de Lengua en el ordenador y después jugué con los playmóbiles y por último hice un dibujo. Ana me dijo que cuando me quitaran lo que llevo en la mano derecha, o sea, el gotero, lo repetiría y lo colgaríamos en el blog. Todavía no se cómo se llama el blog pero espero que a los demás les guste mi dibujo.Esa misma mañana fue cuando vino a visitarme mi cuidadora Mari Nieves.
Cuando vino Mari Nieves me dijo que no se esperaba que yo estuviera aquí.¡Nadie se esperaba que yo estuviera aqui!Entonces me dio una caja blanca muy bonita. Le quité el plástico que llevaba y al abrirlo estaba lleno de bombones de todos los sabores que os podéis imaginar:chocolate, chocolate con crema de avellanas, chocolate con avellanas y avellanas.Con tantas avellanas me iba a desmayar, ¿sabéis por qué?Pues porque mi abuelo se pasa el día preguntándome cosas como estas: «¿Quieres avellanas, quieres chocolate, quieres chocolate con avellanas, quieres nueces, quieres nueces con avellanas? Y con tantas preguntas como esas me mareo así que imaginaos que vuestro abuelo os haga esas preguntas cada día y cada hora. Sería un fastidio,¿verdad? Pues a mi me lo hace todos los días, cada hora que pasa.
Después de comer, estuve de nuevo haciendo vídeos, me estaba cuidando mi abuela y yo estaba haciendo vídeos graciosos, después nos pusimos las dos en la cama y casi nos meamos, eran tan graciosos...después de cenar estuve viendo otra peli llamada «Enredados». No sé si la habéis visto pero es muy graciosa.
_Capitulo 5 ¡Necesito paz!
Al despertarme, lo primero que hacen las enfermeras es mirarme la fiebre. Me despierto y me miran la fiebre, es que eso no es normal.No me dejan ni despertarme en paz, yo necesito paz, es que no se enteran que una niña de 9 años, 121 cm, con el pelo marron y rubio, con los ojos marrones tirando a miel..uff como tarda mi descripción ...
Pues que una niña asi no se nota que necesita paz. Me habéis enfadado tanto que voy a estar 20 minutos sin escribir. Pero...¡ qué tonta soy!, si pasan los minutos o no, no os vais a enterar pues no tengo más remedio que seguir escribiendo. Pues sigo, que no me dejáis en paz. DESPUES DE HABERME MIRADO LA FIEBRE Y NO HABERME DEJADO EN PAZ decidí ir al txikipark. Allí había una chica que estaba dibujando un gatito muy bonito.(Que al parecer también era una de las chicas de Cruz Roja).
Me dijo que qué quería hacer y le dije si podia hacer un dibujo. Me sacó un papel con muchos rotuladores y empecé a pintar un hada, después el perro y lo demás no lo terminé de pintar. En el dibujo aparecía un hada con un hermoso vestido y en la mano sujetaba una varita mágica, más abajo un perro le miraba fijamente y al lado del perro había una manta con la que se tapaban dos niños que estaban durmiendo. De fondo había una habitación con un armario lleno de muñecos y juguetes, libros y cuadernos, estaba lleno y en la ventana se veía la luna luciendo una hermosa luz.
1 comentario:
Hola Ainhoa, ¡eres preciosa! ¡y qué sonrisa tan bonita tienes!
Me han gustado mucho los nuevos capítulos de tu experiencia en el hospital, y creo que tienes una facultad especial para escribir y transmitir.
Sigue compartiendo con todos tus vivencias. Nos enseñas mucho.
Eres un cielo y te deseo que todo te vaya bien.
Espero impaciente la continuación de tus escritos.
Un fuerte y cariñoso abrazo,
Mª Cruz
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